
El Ayuntamiento de Nigrán rehabilitará sendas fuentes y lavaderos de Sancho de Arriba y de Abajo (Panxón) y la zona verde que los comunica a través del Taller de Empleo de la Mancomunidad “Pedras do Miñor”. Los 16 alumnos-trabajadores de las especialidades de albañilería y cantería comenzaron esta semana las obras para restaurar estos elementos patrimoniales y todo su entorno.
El taller, que inició su andadura en agosto y tiene una duración de un año, consta de este trabajo práctico de rehabilitación de espacios públicos de los tres ayuntamientos del Miñor, seleccionando Nigrán estos elementos para el proyecto (en Baiona fue el paseo de Monte Boi y mejoras en el campo del Aral y en Gondomar también incluyeron lavaderos).
“El objetivo es poner en valor este espacio singular del barrio de Sancho y crear un lugar amable para los vecinos, creemos que este era el lugar más idóneo porque precisamente lo que necesita son muchos trabajos de cantería”, resume el alcalde y presidente de la Mancomunidad, Juan González, quien incide en el valor etnográfico de las fuentes y lavaderos “como verdaderos núcleos de cohesión social” en el municipio. De hecho, a mayores el Ayuntamiento de Nigrán está finalizando las obras contratadas para rehabilitar, conservar y consolidar siete lavaderos municipales de Camos, Parada, Priegue y Panxón con una inversión de 100.430 € a cargo del Plan Concellos 2020 (actualmente se está tramitando ya un segundo plan para llegar a más).
Esta zona de Sancho resulta especialmente sensible desde el punto de vista patrimonial porque consta de una red de arroyo que conecta diferentes presas de regantes (este canal será sustituido por uno abierto de lastre para ver el discurrir del agua); y, por otra parte, hay una red de agua potable que surge en el propio lugar como fuentes de uso doméstico aún muy empleadas por los vecinos. Ambas fuentes y lavaderos (en Sancho de abajo con cubierta de hormigón) están comunicadas por una zona verde que también se incluye en el proyecto creando un camino de loseta de granito y compactando toda la superficie.
Los trabajos de restauración incluyen todos los elementos: desde el repicado y pintado de los elementos de hormigón y nuevo encintado de cal, hasta la sustitución de diferentes elementos por piedra o nuevas escaleras con escalones únicos, creación de piezas singulares en cantería de final de muros o sustitución de pavimento. A mayores, se elimina el actual mobiliario urbano, totalmente incoherente con la zona, por bancos nuevos de piedra. “La mejora va a ser absoluta y significará recuperar y dar a conocer este entorno para todo el municipio”, sintetiza González.
Los 16 alumnos-trabajadores (8 de cantería y 8 de albañilería), estaban en situación de desempleo y fueron seleccionados desde la Oficina de Empleo de Baiona para ser todos de la comarca, percibiendo durante la realización del taller el salario mínimo interprofesional por una jornada completa. Hace falta destacar la gran necesidad de mano de obra en el sector de la construcción, motivo por lo que la Mancomunidad se decantó por organizar “Pedras do Miñor”. “Muchos de estos alumnos saldrán de aquí ya con trabajo y otros lo encontrarán inmediatamente porque hay gran demanda y la formación que están recibiendo es de excelente calidad, la prueba es el resultado de las rehabilitaciones”, finaliza González.