
El Ayuntamiento de Nigrán inició esta semana, con la colaboración de la Comunidad de Montes, una nueva fase de excavación y musealización del Castro de Chandebrito destinada a conservar, consolidar y restaurar la muralla superior del primer recinto (datada en el VIII a.C) y cuya intervención se estima en un mes. Con este objetivo, el Ayuntamiento cuenta con una subvención de 13.000 € de la Diputación de Pontevedra destinada a la rehabilitación y señalización del patrimonio histórico-cultural. Adicionalmente, el gobierno local llevará al próximo pleno a consignación de 11.000 € del remanente de Tesorería para la redacción de un proyecto que contemple la exhumación de 400 metros cuadrados de terreno ubicado entre esta muralla y la siguiente inferior, lo que permitirá dejar a cielo abierto muchas más estructuras (principalmente viviendas) y consolidar ambas fortificaciones.
De este modo, el Ayuntamiento se compromete con la Comunidad de Montes de Chandebrito para avanzar radicalmente en las excavaciones iniciadas en el 2019 a través del cooperativo Árbol Arqueología (encargada también de la intervención actual). “La meta es situar este castro como un referente etnográfico en toda Galicia, el potencial es enorme y no queremos desaprovecharlo”, indica Juan González, alcalde de Nigrán, quien subraya que “es el gran tesoro patrimonial de Nigrán y de la comarca”.
Esta segunda actuación, en la que ya se está trabajando conforme a la propia autorización de Patrimonio, supondrá restaurar un tramo de aproximadamente 110 metros cuadrados de muralla localizados en la terraza superior y que ya había quedado parcialmente a la vista en las excavaciones promovidas desde el Ayuntamiento en el 2019 en los 58 metros cuadrados colindantes, donde se encontraron tres construcciones diferentes y otras dos murallas a mayores. Por lo tanto, la nueva exhumación permitirá apreciar mejor la naturaleza del Castro como recinto típicamente fortificado.
“Desde abajo apreciara como un muro totalmente vertical difícilmente expugnable, pero una vez que te acercas a él puedes ver que es más bien un socalco donde acopiaban las piedras, estamos seguros de que sus habitantes jugaron con esta perspectiva a su favor a la hora de construirlo”, señalan los arqueólogos de Árbol, que trabajarán a lo largo de 20 días en un equipo compuesto por cinco expertos y dos becarios restauradores. “Esta nueva excavación quedará totalmente a la vista, por lo que dará una idea clara al visitante de como era el Castro en su origen, que segundo los diferentes hallazgos podemos situar en el S. VIII”, explica Benito Vilas, uno de los arqueólogos responsables.
“Todos comprendemos que la cultura, el respeto al medio ambiente y la actividad económica deben ir siempre de la mano, por eso desde lo gobierno local apostamos por hacer inversiones como la musealización de este espacio único por su significado histórico y por la situación con increíbles vistas a la ría de Vigo y a la comarca”, destaca el regidor, quien apunta a la creación del primero parque forestal de la comarca en terrenos quemados de las parroquias de Camos y Chandebrito como otro de los grandes “proyectos estrella” del gobierno municipal.
Historia del Castro
El Castro de Chandebrito fue oficialmente excavado en el 2008 en una pequeña intervención que permitió situarlo como habitado entre los siglos VI la. C al II a.C, sin embargo, la nueva investigación realizada en el 2019 por Árbol Arqueología a instancias del Ayuntamiento de Nigrán amplía la ocupación del VIII a.C al I d.C. Es decir, tiene su origen a finales de la Edad de Bronce, en los inicios de la cultura castreña que tres siglos más tarde se desparramaría por toda Galicia dando lugar a la mayoría de los asentamientos conocidos. Así lo certifican las decenas de piezas encontradas (husos de hilo, lana y lino, piedras de afilar, piezas de metal, una cuenta púnica…) y los miles de fragmentos de cerámica de diferentes épocas de la Historia y muy bien conservadas, algunas de ellas con decoración profusa (aparecieron desde ánforas romanas o fenicias que certifican el comercio de los habitantes de Chandebrito con los pueblos mediterráneos la cerámica propiamente castreña). Así, a pesar de la creencia popular de ser una sociedad eminentemente guerrera, los antiguos habitantes de Chandebrito vivían de la agricultura y de la ganadería.