
El Gobierno de la Diputación viene de dar luz verde a 2.141.000 euros del Plan Concellos que, como informó la presidenta provincial, Carmela Silva, llegarán a Sanxenxo, A Estrada, Forcarei, Nigrán y A Cañiza “para financiar importantes actuaciones de humanización o de mejora viaria con las que los ayuntamientos transforman el espacio público de la mano de la Diputación”. Nigrán contará con 373.700 para humanizar la Plaza de Rosalía de Castro, aprovechando así la inclusión en esta área de la nueva biblioteca que también financió la Diputación con el Plan Reequilibrio.
El Ayuntamiento de Nigrán remodelará la plaza de la nueva Biblioteca Municipal para extender el uso sociocultural a este gran espacio público de 2.958 metros cuadrados e infrautilizado actualmente por los vecinos. Así, dispone ya de un proyecto redactado por los mismos arquitectos de la Biblioteca, Estudio Gándara Pons, con el objetivo de crear una simbiosis perfecta entre el nuevo edificio público y su entorno, complementándose ambos lugares en sus usos.
“La plaza de la Biblioteca, pese a ser muy grande y estar en pleno núcleo urbano de Nigrán, es prácticamente desconocida para los vecinos porque no resultan visibles sus accesos y, tal y como está conformada, no invita a pasar el tiempo de ocio allí, así que lo que pretendemos es revitalizarla y recuperarla con una intervención sencilla para facilitar usos socioculturales y de los propios negocios que acoge”, explica el alcalde, Juan González, quien avanza que también será “rebautizada” al compartir oficialmente el nombre “Rosalía de Castro” con la plaza vecina, lo que lleva a confusión. “El objetivo final es que los vecinos redescubran esta gran plaza y que el nuevo diseño forme una simbiosis perfecta con la Biblioteca y sus usos”, concluye.
Con una inversión prevista de 360.000 €, la intervención comprende la ubicación de un graderío en el actual manto vegetal de la zona noreste aprovechando el salto de cuota (a un lado de la Biblioteca). Esta nueva bancada longitudinal estará orientada cara un espacio central en la plaza que será una fuente lúdica para el juego infantil pero que, al mismo tiempo, podrá funcionar como escenario natural al aire libre para posibles actuaciones. Paralelamente, y también aprovechando el fuerte desnivel, se instalará un tobogán de acero inoxidable del lado de las nuevas gradas. Para complementar el equipamiento para los más pequeños también se prevé en el lateral este camas elásticas enrasadas con la superficie y un área de montículos de caucho.
La remodelación busca también abrir visualmente la plaza a la ciudadanía e integrarla con la Biblioteca, por lo que se plantea pavimentar en piedra el acceso desde Carretera por la Vía, tal y como está actualmente circundando el edificio, y en el eje central se proyecta suelo de hormigón pulido con franjas de césped. La actual escalera que baja a la plaza se modificará por una de mayores dimensiones que continúe con el itinerario peatonal. Para finalizar la actuación en este sentido de otorgarle mayor accesibilidad, se rediseñará la cuesta noreste para hacerla más amplia. Además, la superficie actual de la plaza se encuentra en muy mal estado, por lo que la intervención propone repavimentarla con placas de hormigón y zonas de adoquín intercalando céspedes, para crear así espacios diferenciados y reducir la sensación de “aridez” frente a un lugar más amable.
Finalmente, se renovarán los colectores de pluviales deteriorados, todo el mobiliario urbano, se le otorgará iluminación ornamental a las nuevas zonas y se aumentará la vegetación complementándose con nuevas especies y con plantas tapizantes.
“Queremos que los usuarios de la biblioteca tengan aquí el lugar idóneo para sentarse a leer un libro o hacer un descanso en el estudio, pero que también pueda ser un lugar perfecto para organizar un cuentacuentos al aire libre o venir en familia a tomar un café o para jugar los niños”, explican los arquitectos Juan Pons y Lucas Gándara.