
Los Arroases del Val Miñor celebraron este domingo su tercera Xuntanza, como es habitual en Panxón, con salida desde la rampa del puerto pesquero. Los más de medio centenar de participantes recibieron un gorro de natación conmemorativo del evento y una mascarilla de protección sanitaria, gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Nigrán.
“Esto empezó en la piscina del Val Miñor de A Ramallosa. Un grupo de cuatro nadadores a los que nos gustaba nadar en la piscina pero también queríamos nadar en el mar. Empezamos a meternos en el mar, primero en verano y después con el tiempo empezamos a nadar en invierno. Agua fría, al principio costaba mucho y ahora ya hay muchos que nadamos a pelo incluso, sin neopreno”, comenta Fon Martínez, uno de los impulsores del evento, que tradicionalmente sirve para despedir el año deportivo pero que en esta ocasión tuvo que ser cancelado por las condiciones meteorológicas del pasado 26 de diciembre, día inicialmente previsto para su celebración.
Se trata un recorrido totalmente costero, desde el principio de Panxón hasta la boya que se colocó frente al faro de Playa América y vuelta. En total, 1.500 metros, en los que estuvieron escoltados por embarcaciones ligeras del Club Marítimo de Panxón, que un año más colaboró con la Reunión, miembros de ByS Ría de Vigo y Protección Civil. Por protocolos Covid, por segundo año consecutivo no pudieron disfrutar de los pinchos con los que el club les agasajaba habitualmente.
Para que todos los participantes se sintieran arropados, se hicieron tres grupos de velocidad para nadar de manera más o menos compacta y siempre detrás de la cabeza del grupo. Además, como cada año, se trató de una nadada solidaria, ya que los asistentes aportaron 400 kilos de alimentos no perecederos que fueron recogidos por el Ayuntamiento de Nigrán y que serán distribuidos por los Servicios Sociales.