Los furancheiros pueden solicitar a los ayuntamientos la apertura de sus locales hasta el 31 de julio

FOTO: PABLO F. ESTÉVEZ // A miúdo Suso e Luís, furancho A Ponte, sacan as súas harmónicas para dalo todo.

La directora xeral de Administración Local, Marta Fernández-Tapias y el delegado de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís, mantuvieron está mañana una reunión con el presidente y el vocal de la Federación Provincial de Furanchos, donde se les indicó que siempre que cumplan con las medidas higiénico sanitarias establecidas por el Estado, el inicio de su actividad está permitido desde el 11 de mayo en aquellos casos en que prestan el servicio al aire libre y desde el pasado lunes, 25 de mayo, cuando desarrollan la actividad en el interior.

Los furanchos son locales en los que sus propietarios venden el excedente del vino de cosecha propia. Se trata por lo tanto de lugares abiertos al público, que si bien tienen unas singularidades que justifican una regulación propia y diferente de otros establecimientos, deben seguir también las restricciones que por razones de salud pública rigen para los establecimientos y locales comerciales, actividades de hostelería y restauración durante el estado de alarma.

Marta Fernández-Tapias les indicó que el CECOP en su reunión del 5 de mayo, ya había recomendado a los ayuntamientos, que son los que tienen competencias en estos locales, tener en cuenta la posibilidad de ampliar la temporada 2020 hasta el 31 de julio para que los furanchos pudieran extender su actividad, que puede ser de un máximo de tres meses, más allá de los períodos inicialmente autorizados.

Hay que recordar que cada ayuntamiento cuenta con un Registro de Furanchos para la inscripción de todos los furanchos que radiquen en su ámbito territorial, y deberán vigilar y garantizar el debido cumplimiento de las normas.