El Bloque Nacionalista Galego de Gondomar denuncia la actitud del Alcalde de Gondomar por no dar respuesta a la petición de la Defensora del Pueblo. Esta le demandaba información sobre el servicio del agua en Vilaza tras la queja presentada por la Portavoz Municipal del BNG, Manuela Rodríguez, ante la falta de solución al problema del agua en la parroquia y que fue generado por el gobierno local hace ya ocho años.
Conviene recordar que en julio del año pasado, la actual empresa concesionaria del servicio municipal de suministro de agua, Espina y Delfín, había remitido al Alcalde un documento donde informaba de una situación de alerta por sequía relacionada con el abastecimiento de agua a la parroquia de Vilaza. Supuestamente porque, al no estar controlado el servicio a los vecinos, una parte de ellos estaría teniendo un consumo anormalmente exagerado. La concesionaria indicaba que, en la situación de alerta por sequía de aquel momento y de continuar así el consumo, era previsible que tuviera que restringir el abastecimiento municipal con cortes de agua a Gondomar en determinados períodos horarios.
Para el BNG es muy preocupante que un año después, y cuando todo parece indicar que en 2023 pueda darse una situación de sequía similar al año anterior, el servicio de abastecimiento de agua en Vilaza siga sin regularizar. Y considera “de una gran irresponsabilidad que aún no se activara ninguna medida para controlar el consumo y evitar los posibles cortes en el suministro de agua”, indica la portavoz del BNG en Gondomar.
Por esa razón, el BNG anuncia que la primera iniciativa que tomará, una vez conformada la nueva corporación este sábado 17 de junio, será la de instar a la convocatoria de la junta de portavoces de los grupos políticos resultantes de las urnas con el objetivo de “resolver ya un problema para el cual el Bloque acercó propuesta de solución en el pleno de diciembre pasado y que quedó sin tratar por falta de interés por parte del gobierno saliente”.
