
El Diario Oficial de Galicia publica hoy la resolución de la orden de ayudas destinadas a financiar los gastos de 190 agrupaciones de voluntarios de Protección Civil (AVPC) de los ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes, mancomunidades o agrupaciones de municipios. Por provincias, 62 asociaciones de A Coruña recibirán ayudas por valor de más de 117.500 euros; en Lugo, serán 33 agrupaciones, con un presupuesto de más de 54.600 euros; en Ourense, hay 65 beneficiarias gracias a una financiación de unos 107.700 euros; y en Pontevedra, las ayudas llegarán a 30 agrupaciones, con más de 60.100 euros.
La Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de la Mancomunidad del Val Miñor recibirá 3.360,50 €. Las ayudas se podrán destinar a necesidades como equipamiento y uniformes; equipos de prevención y protección, siempre que se trate de material fungible; costes de actuaciones llevadas a cabo por la agrupación, mantenimiento, transporte, o conservación y alquiler de la base; pago de seguro de accidentes y responsabilidad civil del personal voluntario; costes de formación de sus miembros; o equipamiento de material informático y de comunicaciones.
Esta convocatoria complementa otros programas del Gobierno gallego para mejorar los medios de emergencias de los ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes. Así, además de las ayudas directas para colaborar con los gastos de funcionamiento, la Xunta refuerza el material de emergencias de las AVPC con la convocatoria anual para facilitar equipamiento. En la orden del año pasado se destinó 1 millón de euros a la cesión de 26 tiendas de campaña para emergencias, 19 vehículos tipo pick-up, 6 remolques de emergencias, 8 esparcidores de sal y 8 cuchillas de retirada de nieve para las actuaciones en ayuntamientos más afectados por las nevadas.
Así, la inversión de la Xunta en los últimos años en las AVPC de la comunidad alcanza los 18 millones de euros, de los que 14 millones se destinaron a reforzar su equipamiento y los 4 millones restantes a sus costes de mantenimiento. Además, a través de la Academia Gallega de Seguridad Pública (AGASP), los voluntarios de estas agrupaciones y los profesionales de los distintos servicios de emergencias reciben formación para actualizar sus conocimientos y poder realizar una intervención eficaz ante cualquier incidencia.