En la concentración celebrada está mañana delante del Centro de Salud de Gondomar, en la que participaron vecinas y vecinos del ayuntamiento acompañadas de la portavoz municipal del BNG, Manuela Rodríguez, y la diputada del Bloque en el Parlamento gallego, Carmela González, se reclamaron del SERGAS acciones inmediatas para restituir la atención presencial y para finalizar con las listas de espera en la atención primaria.
Para el BNG, en el actual momento de la pandemia la Atención Primaria debería ser llave para garantizar la atención sanitaria. Sin embargo, los recortes del Partido Popular hacen que este servicio cuente hoy con 142 M€ menos que hace once años; recortes que implican la reducción de personal de primaria y la precarización del servicio a las personas enfermas. Así, a día de hoy no pueden recibir atención personalizada y presencial de su médico de cabecera después del SERGAS decidir que la atención se prestara casi exclusivamente a través de consultas telefónicas.
La sobrecarga de trabajo que ya venía padeciendo el personal de la atención primaria, le fueron añadiendo tareas propias de la Covid (diagnóstico, seguimiento, aislamiento, identificación, funciones de rastreo), que sumadas las derivadas de la atención telefónica y de la carga burocrática, se traduce en teléfonos colapsados, personal administrativo y celadorxs al límite, soportando el conjunto una presión enorme en la gestión y la atención de las citas.
La organización nacionalista denunció que la nefasta gestión del Servicio Gallego de Salud (SERGAS) está provocando consecuencias desastrosas en la atención sanitaria pública gallega: escasez de profesionales que sufren sobrecarga de trabajo y no cobertura de bajas y vacaciones con personal sustituto, listas de espera de semanas para consultas, analíticas e incluso para la atención telefónica, controles de salud de pediatría con muchas demoras, “o el cierre de las consultas de tarde como ocurrió en el pasado mes de septiembre en este centro de salud de Gondomar”, explicó la concejal del BNG, Manuela Rodríguez.
Esta saturación en el servicio de salud llega a provocar que haya enfermos crónicos descompensados (personas con hipertensión, diabetes, cardiopatías, problemas renales), o que cada vez más personas se vean en el deber de acudir a la sanidad privada delante de la falta de respuesta de la pública, lo que implica mayor desprotección de la población con menos recursos.
La diputada del BNG, Carmela González, afirmó al final de la concentración que “la respuesta a la situación de pandemia no puede estar basada en incrementar las restricciones de acceso a la asistencia en el sistema público, por lo que supone de riesgo de llevarnos a un problema de salud colectiva”.
El BNG, que ya venía denunciado en los últimos años el deterioro que la gestión del PP de Feijóo estaba provocando en la atención sanitaria, está convocando estas concentraciones acompañadas de una recogida de firmas para exigir del SERGAS la restitución de la atención presencial con el personal y las medidas de prevención de contagios propios de una atención digna, la activación de protocolos claros y unificados para la atención sanitaria, y el incremento del número de profesionales con contratos dignos y del presupuesto destinado a la atención primaria en 200 M€, como acciones inmediatas para activar la atención presencial y finalizar con las listas de espera y con la precariedad en este servicio.
