Los arenales gallegos, dada la gran afluencia de usuarios durante el mes de agosto, constituyen uno de los principales focos de atención para la campaña Oportunidades Galicia, que dirige la Consellería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio y en la que colabora Ecoembes y Sogama.
Educadores medioambientales, con su centro operativo en un aula móvil, estarán este viernes 12 de agosto desde las 15:00 hasta las 19:00 horas en la Playa de A Ribeira, en Baiona, intentando captar la atención de los bañistas para recordarles que la gestión sostenible de los residuos urbanos también debe estar presente en vacaciones y durante el tiempo de ocio. También habrá un hinchable para los más pequeños.
Las explicaciones sobre la necesidad de aplicar cada día la estrategia de los tres erres (reducción, reutilización y reciclaje) se sucederán de forma permanente. Producir menos residuos, consumir de forma responsable, evitar el desperdicio alimentario, reutilizar los productos el mayor número de veces posible y separarlos por tipologías para que puedan ser reciclados, constituyen algunas de las cuestiones que conformarán el manual de instrucciones de una iniciativa itinerante que nació y evolucionó con un único objetivo: incrementar las tasas de reciclado en Galicia y lograr que la población se beneficie de sus ventajas ambientales, económicas y sociales. Porque reciclando se ahorra energía y materias primas, pero también se incentiva la economía, se crea empleo y se alcanzan mayores cuotas de bienestar y calidad de vida para la población.
Separar correctamente los desechos y depositarlos en los contedores correspondientes, constituye aún una asignatura pendiente, sobre todo en el caso del amarillo. En este sentido, los monitores concretarán de forma permanente lo que debe y no debe ser depositado en cada recipiente: amarillo, para latas, briks y envases de plástico; azul, para envases de cartón y papel; iglú verde, para envases de vidrio; y contedor convencional, para la fracción restante; sin olvidar los recipientes específicos para pilas y los puntos limpios municipales, destinados a acoger residuos de carácter especial tales como voluminosos, aparatos eléctricos y electrónicos, pinturas, fluorescentes, aceites, etc..
