El Ayuntamiento de Nigrán pidió oficialmente esta mañana una reunión urgente con la Consellería de Infraestructuras y Vivienda tras conocer su respuesta a los alegaciones realizados al proyecto de mejora de la seguridad vial en la PO-552 (puntos kilométricos 10+600 a 13+800). Estos alegaciones se hicieron precisamente con el consenso unánime de toda la corporación en febrero de 2018 sin recibir respuesta alguna hasta hoy, cuando para sorpresa del gobierno local la Xunta informa de que cerrará el acceso al tráfico en la entrada al Camino Barreiras (Mallón) por la PO-552 dejando solo un acceso peatonal mediante escaleras; rechaza construir un entorno más seguro para peatones en la zona de Ureca y, finalmente, pretende hacer de un único sentido los caminos Cruceiros y Mallón, ambos de titularidad municipal.
«Bajo ningún concepto vamos a aceptar estas soluciones que la Xunta pretende imponer porque son perjudiciales para los vecinos y porque existen alternativas que no son lesivas. Desconocemos el plazo de inicio de las obras pero no vamos a aceptar el cierre de camino de As Barreiras ni permitir que impongan sentidos únicos en caminos de titularidad municipal», subraya el alcalde, Juan González, quien lamenta que la Xunta también desestima construir aceras en toda la zona de Ureca.
El Ayuntamiento, en sus alegaciones, le había pedido a la Xunta una alternativa a la glorieta expuesta a la altura del Camino de As Barreiras ya que impedía el acceso al tráfico desde la PO-552 siendo este un vial con numerosas casas y con la empresa Piensos Biona justo en la entrada. La respuesta de la Xunta es sorprendente porque finalmente cierra este encendido a vehículos y solo permite el peatonal mediante la construcción de unas escaleras. «Dicen que la glorieta es la opción idónea para reducir siniestralidad pero supone hacer de esta calle un auténtico tapón, ya que obliga a los vehículos a entrar por la calle Manuel González Prado sin tener ninguna salida en Barreiras ni manera de dar la vuelta», señala el alcalde, Juan González, quien esta misma mañana se reunió con los vecinos y negocios, muy preocupados y preparados ya para recoger firmas en contra.
Entre estas medidas a mayores que reclamaba el Ayuntamiento en sus alegaciones estaba la mejora de la accesibilidad peatonal en el entorno de Ureca (rotonda con la AG-57 a Porto do Molle o Camino A Camesella), ya que actualmente sólo dispone de un único itinerario peatonal muy complejo a pesar de ser una zona muy transitada dado que desde ahí se entra al sendero del Río Muíños o a las instalaciones deportivas. La Xunta considera que los trechos existentes en la margen izquierda (dirección A Ramallosa) son ya suficientes y no se expone actuar en el otro margen o dotar de continuidad al escaso tramo existente. «No se entiende que siendo un proyecto de mejora de la seguridad no se contemple actuar. Es imprescindible la construcción de itinerarios seguros y accesibles en toda esta zona y en el Camino de O Pinicho, Carballal, Manuel González Prado o Valle Inclán, además de Rans en el cruce con Telleira», recalca el alcalde.
Finalmente, el Ayuntamiento rechaza que la Xunta pretenda imponer el único sentido en las calles Cruceiro y Camino Pedreiros, en Mallón, ambas de titularidad municipal. Responden que no quieren mantener el doble sentido «dada la nueva distribución del tráfico» y al no disponer «de una anchura mínima». «La mayoría de los caminos de Nigrán tienen esas dimensiones sin que supongan un riesgo de siniestralidad mayor, no podemos perjudicar de esa manera a todo el barrio, además de que son vías municipales de nuestra competencia», insiste el alcalde, Juan González.
