Desde la Asociación de Empresarios e Comerciantes do Val Miñor (OVALMI) denuncian los problemas que están teniendo distintos negocios de Nigrán, ubicados en la PO-340 a la altura de A Ramallosa.
Los problemas derivan del material utilizado en la ejecución de la senda mixta peatonal-ciclista que unirá A Ramallosa con Gondomar, obra sufragada por la Xunta de Galicia, con una inversión de 2,3 millones de euros.
Según las quejas que les vienen trasladando los propios empresarios, cada vez que llueve se desprende la capa superior coloreada con la que se ha impreso la senda, provocando que sus negocios se ensucien de forma constante, y que les sea imposible mantener sus establecimientos limpios.
Si optan por barrer o limpiar dicha senda para evitar que sus negocios se ensucien, observan cómo se deshace el material aplicado en la capa superior de la senda.
Esta situación podría derivarse de que en las obras de la senda que unirá A Ramallosa con Gondomar se estén utilizando materiales de mala calidad, o inadecuados, o que no se apliquen correctamente las técnicas constructivas que precisan los materiales.
Desde OVALMI, reclaman a la Xunta y al Concello de Nigrán una solución inmediata a este problema, sobre todo ahora que empieza la época de lluvias constantes, lo que hace que la situación se complique todavía más para los negocios de la zona.
