El Ayuntamiento de Baiona se encuentra sumergido en los preparativos de la XXIII edición de la Fiesta de la Arribada, la tercera desde su declaración de Fiesta de Interés Turístico Internacional. El Consistorio dispondrá un operativo especial de emergencias durante los días 2, 3 y 4 de marzo, en los que se prevén entre 150.000 y 200.000 visitantes, por el que se incrementarán las medidas de seguridad y se intensificará la colaboración entre los distintos cuerpos de seguridad.
Así lo han trasladado en una rueda de prensa la Subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Ana Ortiz, el alcalde del municipio, Ángel Rodal, y el Inspector Jefe de la Policía Local, Pedro Alonso, tras la reunión de la Junta Local de Seguridad de Baiona, a la que también asistieron representantes de todos los cuerpos y fuerzas de seguridad que intervendrán para establecer el plan de actuaciones que se aplicará durante la celebración de la Fiesta de la Arribada.
Con el objetivo de garantizar tanto la seguridad como los accesos a la villa y el buen desarrollo de las actividades programadas, se han dispuesto entre 250 y 270 efectivos. En este operativo especial, además de la Policía Local de Baiona, participarán agentes locales de otros municipios, como son A Guarda, Cambados, Cangas, O Rosal, Salceda de Caselas, Lalín, Vigo y Nigrán. A estos efectivos se unirán las tres secciones de Guardia Civil, que son las del mar, la de tráfico y la especializada en seguridad y orden público. En el operativo también tienen una destacada función los servicios de Emergencias del Val Miñor y Protección Civil.
Todos ellos serán coordinados a través del puesto avanzado del 112, un camión equipado con los equipos más avanzados técnicamente que permite a los responsables adoptar las decisiones sobre el terreno, contar con información a tiempo real y un espacio propio en el que reunirse. Cuenta además con drones para el control de masas y vehículos. Por segundo año los medios sanitarios contarán con un autobús medicalizado, que atenderá “in situ” las emergencias, para evitar el colapso de las ambulancias, con una respuesta de minuto y medio desde el aviso a cualquier lugar de la villa.
El protocolo de seguridad contempla varias líneas de actuación, entre ellas las diseñadas especialmente para casos de emergencia que se podrán llevar a cabo tanto por mar, como por aire y tierra. Las actuaciones también se centran en garantizar la seguridad de todos los ciudadanos con acciones preventivas.
Ángel Rodal destacó y agradeció el interés de Ana Ortiz por el buen desarrollo de la Fiesta de La Arribada. “Año tras año la subdelegada asiste personalmente a la coordinación, esto demuestra interés, sensibilidad y sentido del deber por parte del máximo responsable de la seguridad en la provincia”.
Según el regidor, el dispositivo consiste en un «plan de autoprotección» en el que se ha incorporado «la experiencia de años anteriores». «Año a año mejoramos en afluencia y en seguridad para que no haya problemas y, si los hay, se sepa actuar. El primer requisito para que la fiesta siga creciendo es la seguridad».
Finalmente, Rodal ha señalado que, tras el éxito del año pasado, se volverá a instaurar el sentido único de circulación para los peatones en las principales calles del Casco Histórico. La medida, instaurada por primera vez el año pasado y aprobada a propuesta de ACEBA, tiene como objetivo hacer más fluido el tránsito en el Casco Viejo y facilitar la movilidad.
Asimismo, por tercer año consecutivo se habilitará una bolsa de aparcamiento de 10.000 plazas totalmente gratuitas en Porto do Molle (Nigrán), desde donde partirán lanzaderas (también gratuitas) cada media hora. Además, habrá barcos que conectarán el puerto de Baiona con los de Vigo, Cangas, Moaña y Panxón.
