La Agrupación Vecinal Somos Nigrán denuncia públicamente “el asalto al patrimonio de las familias consumado hoy por el alcalde Juan González y su equipo de gobierno”. Se aprobó definitivamente por el pleno una reforma del impuesto de plusvalía municipal que es, en la práctica, “una maquinaria de recaudación implacable diseñada para cobrar el máximo posible en el peor momento de los vecinos y vecinas”. “El alcalde no solo eliminó las bonificaciones del 95% por herencia, sino que fue mucho más allá al consolidar un tipo impositivo abusivo del 27% y obligar a adoptar los coeficientes máximos estatales. Esta ‘subida oculta’ garantiza que el cálculo de la base imponible sea siempre de los más altos permitidos por la ley, elevando la cuota a pagar de manera automática. Resulta moralmente insultante que un alcalde que presume de tener 11 millones de euros de remanente y deuda cero, utilice su poder para ‘trucar’ las ordenanzas y saquear las herencias de quien trabajó toda la vida en Nigrán”, lamentan desde la Agrupación Vecinal.
Desde Somos Nigrán quieren invitar al BNG de Nigrán a una “reflexión profunda” sobre el sentido de su voto afirmativo con esta medida apoyando al gobierno municipal como si uno más de ellos se tratara. “Creemos que el concejal que tiene el Bloque en Nigrán debe conectar con la realidad de nuestras parroquias y entender que el ‘especulador’ en Nigrán no es el vecino que recibe la casa de sus padres, sino los fondos de inversión que esperan a que las familias se asfixien fiscalmente para comprar barato y seguir inflando la burbuja. Le pedimos al BNG que analice si esta fiscalidad de ‘máximo rigor’ no está, en la práctica, facilitando la expulsión de las personas originarias de Nigrán y favoreciendo que nuestra tierra acabe en manos de grandes capitales foráneos. La defensa del arraigo y del derecho de los gallegos a vivir en su propio territorio debería estar por encima de estrategias recaudatorias que solo sirven para engordar una cuenta bancaria municipal ociosa mientras las familias pierden su patrimonio”.
“Es una desfachatez que el Gobierno presuma de tener los presupuestos más altos de la historia mientras utiliza tecnicismos para meterle la mano en el bolsillo a la clase trabajadora de las parroquias. Si un Concello que manifiesta que le sobran 11 millones de euros no es capaz de invertir en servicios básicos, no existe ninguna razón económica para esta subida; solo existe una gestión que prioriza el falso superávit sobre el bienestar social”, concluyen.
Desde Somos Nigrán advierten que esta es una “traición a la ciudadanía” que asfixia a las familias de toda la vida mientras es incapaz de ejecutar las inversiones prometidas, “convirtiendo Nigrán en un parque temático exclusivo para quien viene de fuera y expulsando mediante impuestos de lujo a quien de verdad hace pueblo cada día”.
