El Grupo Municipal del BNG de Mos llevará al próximo pleno una moción para solicitar a la Xunta de Galicia la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de la Iglesia románica de Santa María de Guizán y del Pazo de Mos, dos de los elementos patrimoniales más relevantes del ayuntamiento por su valor histórico, arquitectónico y cultural. La iniciativa pretende avanzar en la conservación y puesta en valor de un patrimonio que forma parte de la identidad colectiva de los vecinos de Mos.
En la actualidad, Mos cuenta con un único elemento patrimonial incluido en el catálogo autonómico de los BIC: la mámoa de San Colmado o del Meixoeiro, situada en el recinto del Círculo Mercantil, algo difícilmente comprensible si se tiene en cuenta la amplia riqueza patrimonial existente en el municipio. Para el portavoz municipal del BNG, Gustavo Barcia, “es evidente que Mos tiene muchos más elementos que merecen la máxima protección patrimonial, y es responsabilidad de las administraciones impulsar ese reconocimiento”.
El grupo municipal del BNG entiende que tanto la iglesia de Santa María de Guizán, templo románico del siglo XII con posibles restos anteriores de origen visigótica, como el Pazo de Mos, edificio singular por su arquitectura y por la relevancia histórica de los linajes representados en su escudo, reúnen sobradamente los valores necesarios para ser declarados BIC. “No es suficiente con presumir del patrimonio, hay que cuidarlo y ponerlo en valor con todas las herramientas a nuestro alcance”, señala Barcia.
Obligaciones y oportunidades
El portavoz nacionalista en el Concello recuerda que “la declaración de BIC implica obligaciones de conservación, pero también abre la puerta al acceso a ayudas y recursos públicos para la rehabilitación y mantenimiento de este patrimonio”. En este sentido, el BNG anuncia que esta moción es un primer paso, ya que en el futuro propondrá la ampliación del catálogo de BIC a más bienes del ayuntamiento. El texto, de hecho, incluye una solicitud para que el gobierno elabore, en colaboración con los técnicos municipales, un catálogo en el que se incluyan todos los elementos susceptibles de acceder a la máxima figura de protección patrimonial.
