El alcalde de Nigrán, Juan González, mantuvo ayer en Santiago una reunión con la conselleira de Infraestructuras Ethel Vázquel y el director de la Agencia Gallega de Infraestructuras, Francisco Menéndez, para abordar los proyectos de la Xunta en la PO-552 y PO-340 a su paso por el municipio. Este encuentro había sido solicitado urgentemente desde la alcaldía ante la disconformidad del Ayuntamiento con determinados aspectos que ya había manifestado en sus alegaciones oficiales y mismo por escrito a la propia Xunta.
El Ayuntamiento de Nigrán considera el resultado de este encuentro muy satisfactorio al confirmar de primera mano que sus alegaciones sobre la prioridad de mantener los semáforos en el entorno de Mallón (PO-552) fue aceptada, así como la de realizar un itinerario peatonal seguro en la zona de la rotonda de Ureca hasta la calle Rans.
“Estamos muy satisfechos de que se hayan escuchado nuestras reclamaciones de la PO-552 y no tenemos duda de que de este modo, hablando entre las dos administraciones, este proyecto y todos los que vengan serán muy beneficiosos para Nigrán”, indica el regidor.
Inicialmente la Xunta había manifestado su rechazo a los alegatos del Ayuntamiento al proyecto de mejora de la seguridad viaria en la PO-552 (puntos kilométricos 10+600 a 13+800) en el entorno de Mallón, ya que eliminaba la regulación semafórica de Cotros (a la altura de la panadería Lana Pintora) añadiendo un carril central de incorporación en la carretera e imponiendo además el sentido único en las calles Cruceros y Mallón, ambas municipales (esta última cuestión en la que el Ayuntamiento demanda mantener el doble sentido no la tienen resuelta aún pero no se muestran inicialmente disconformes). El Ayuntamiento siempre mantuvo que los semáforos instalados hay más de cuatro años como medida de seguridad demostraron funcionar muy bien, mientras que el aparcamiento próximo a la panadería es vital para los negocios allí existentes.
El otro aspecto fundamental que había alegado el Ayuntamiento y que no se había contemplado inicialmente pero ahora sí es la mejora de la accesibilidad peatonal en el entorno de Ureca (rotonda con la AG-57 a Porto do Molle o Camiño A Camesella), ya que actualmente sólo dispone de un único itinerario peatonal muy complejo a pesar de ser una zona muy transitada, dado que desde ahí se entra al sendero del Río Muíños o a las instalaciones deportivas. Para el Ayuntamiento resultaba imprescindible que se incluyera la construcción de itinerarios peatonales en toda esta zona que conectaran directamente con los arcenes de la calle Rans. “Es una muy buena nueva porque al fin se crea un tramo seguro y accesible que unirá A Ramallosa con el centro de Nigrán, ya que hasta ahora era discontinuo e inviable”, subraya González, a quién le comunicaron que las obras arrancarán en el próximo mes.
PO-340
Finalmente, el alcalde de Nigrán transmitió la disconformidad del Ayuntamiento y de los vecinos del Camiño do Pisco (A Ramallosa) con que tras llevar a cabo la Xunta las obras para crear una senda peatonal en la PO-340 se sustituyera la línea discontinua por una continua a la altura de su camino, lo que les obliga a desplazarse hasta la rotonda de A Ramallosa para poder girar hacia Gondomar. La alternativa que propone la Consellería para que los conductores no tengan que ir 1´2 km hasta A Ramallosa y retroceder es crear una semi-rotonda a escasos metros que les posibilite girar con todas las garantías. “Entendieron nuestra preocupación pero insisten en que sus informes de seguridad alertan de la peligrosidad de ese cruce en los meses de verano, cuando se forma caravana en la vía que limita mucho la visibilidad y, por consiguiente, proponen esta opción”, explica González.
